Entorno de Kappelrodeck. La Selva Negra ya no es el bosque primigenio que fuese hace tan sólo un par de siglos. La presión humana, la deforestación y algunas tormentas de efectos devastadores han arruinado el bosque mixto centroeuropeo por excelencia. Los alrederores de Kappelrodeck han cambiado su manto de alta vegetación por viñas.
Aún así, este bosque sigue siendo impenetrable a pocos metros de la carretera. Cuando cae la noche el bosque cierra cualquier entrada de luz. Casi puede transportarte a una edad anterior en la que todavía era recorrido por lobos y criaturas mágicas. Las primeras luces del alba van atravesando poco a poco la cortina vegetal, a la vez que va devolviendo realidad al sueño de cuento de la noche anterior.
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